NUTFOOD

Los consumidores son cada vez más conscientes de la relación entre la alimentación y la salud y del impacto positivo o negativo de la grasa (aceites, grasas de origen vegetal o animal) en función de la naturaleza y cantidad consumida. Por esta razón, los aspectos nutricionales influyen cada vez más en la decisión de compra de determinados productos, aunque la novedad es un factor importante en la decisión de compra ya que muchos consumidores se sientes atraídos por ellos.

El consumo de productos de origen animal (en particular embutidos y lácteos) cada vez es más controvertido por distintos motivos, entre ellos por el efecto perjudicial sobre la salud de las personas, lo que en último término afecta a la sostenibilidad de muchas explotaciones y a la actividad ganadera. Independientemente de que ese efecto esté condicionado por otros factores (componentes del resto de la dieta consumida, ejercicio físico, etc.), sí parece fuera de toda duda que tanto el consumo de una cantidad excesiva como de ciertas composiciones (exceso de grasas saturadas, sal, etc.) están desaconsejadas por parte de los nutricionistas.

Con el objeto de contribuir a poner en valor estos productos a través de la diversificación e innovación es preciso encontrar respuesta a las siguientes preguntas:

i. ¿En qué medida se puede consumir de manera saludable alimentos de origen animal?
ii. ¿Cuál es la cantidad que se recomienda consumir dependiendo de la composición del alimento?
iii. ¿Cómo se puede optimizar el procesado de las materias primas y los alimentos para que se mantengan las propiedades saludables para el consumidor?

Por todo lo anterior, este proyecto aborda la utilización de semillas oleaginosas en la alimentación animal como vehículo de compuestos bioactivos (ácidos grasos, antioxidantes etc,) saludables que permitan obtener alimentos de origen animal innovadores, con un perfil nutritivo saludables y con propiedades beneficiosas para la salud del consumidor