NOTICIA
El pastoreo regenerativo puede conseguir la mejora la salud del suelo
2 noviembre 2015El pastoreo regenerativo puede conseguir la mejora la salud del suelo
En el marco del congreso anual que se está celebrando en Gante (Bélgica), la Dra. Eva Ugarte, directora de Innovación y Tecnología de NEIKER, ha sido reconocida con el Distinguished Service Award por la European Federation of Animal Science (EAAP).
Las técnicas de pastoreo dirigido o regenerativo consiguen unas praderas más sanas, , según ha podido demostrar el Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario, NEIKER-Tecnalia, junto con el Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias, INTIA, dentro del proyecto europeo LIFE REGEN FARMING. Esta metodología de manejo de pastos, que consiste básicamente en manejar el pastoreo en las parcelas según un calendario predeterminado, adaptado a las condiciones variables anuales y en recibir a los animales de forma escalonada, logra una conservación del suelo considerablemente mejor y reduce la huella de carbono por litro de leche producido en un 10%, lo que contribuye a luchar contra el cambio climático.
Las mejoras sobre la salud del suelo que conlleva el pastoreo dirigido se deben en gran medida al mayor tiempo de descanso de las parcelas. Con este método se consigue un menor porcentaje de suelo desnudo, valores más altos de infiltrabilidad y un mayor número de lombrices, que favorecen la oxigenación y fertilización del suelo. Además, en los pastos analizados se observa una mayor cantidad de raíces y una mayor presencia de macrofauna. Todos estos resultados se presentarán en una jornada dirigida a los profesionales del sector, que se celebrará el día 29 de octubre en la sala Izandegia de Roncesvalles (Navarra).
Las nuevas técnicas de manejo de pastos consiguen hasta un 14% más de hierba, según han podido demostrar los técnicos a lo LARGO del proyecto . La producción de hierba ‘extra’ supone un ahorro en la compra de forraje y pone de manifiesto la efectividad técnica y económica del manejo regenerativo. Además, las ovejas manejadas con esta metodología presentan la misma producción y composición lechera, igual peso y condición corporal.
Por otro lado, con las prácticas regenerativas implementadas, en Arkaute (Álava) se elimina el abonado químico, se reduce un 4% el consumo de pienso concentrado y se incrementa un 7% el tiempo de pastoreo. Estos datos suponen una reducción del 10% en la huella de carbono por litro de leche producido.
Investigación de campo en Álava y Navarra
La investigación se ha llevado a cabo en la Granja Modelo de Arkaute (Araba-Álava), con un rebaño experimental de ovejas lecheras de raza latxa; en Roncesvalles con el rebaño experimental del Instituto Navarro de Tecnología e Infraestructuras Agroalimentarias (INTIA) y con distintas explotaciones de vacuno de carne de Urduñederra –agencia de desarrollo local de Orduña (Bizkaia)-.
Los manejos regenerativos que se han implementado en las tres zonas de estudio se han basado en siembras directas de los pastos, empleo de especies perennes y leguminosas en las siembras, abonados orgánicos y pastoreo regenerativo. En los ensayos de Arkaute y Roncesvalles el rebaño de ovejas se ha dividido en dos grupos homogéneos, uno bajo manejo de pastoreo regenerativo y otro sobre manejo de pastoreo libre.
Recuperar la vida del suelo
El pastoreo dirigido o regenerativo tiene como principal indicador el tiempo de descanso de las parcelas, para que estas se puedan recuperar después del pastoreo. Con ello se consigue recuperar tanto la vida del suelo como de las plantas que crecen sobre él. Este manejo dirigido presenta ventajas como incrementar la producción y calidad del forraje, facilitar la recuperación de las plantas y evitar la selección de hierba por parte de los animales, realizando un pastoreo más homogéneo por todas las parcelas. La utilización más uniforme del pasto hace que las deyecciones también se distribuyan de forma más uniforme y mejore la salud del suelo.
Los pastos permanentes (ligados a las prácticas de siembras directas) presentan, además, una gran capacidad de fijar carbono. Todos estos efectos beneficiosos se consiguen ajustando las cargas ganaderas, el tiempo de permanencia de los animales en el pasto y el tiempo de recuperación de la vegetación.